En la época precolombina, el territorio de Girardot estuvo habitado por los indígenas Panches.
El municipio nace con el caserío de "La Chivatera", pues en el lugar era muy común la cría de cabras o chivas, en jurisdicción del municipio de Tocaima, del cual existen datos documentales fechados en 1840 del lugar denominado como "Paso de Flandes", curso obligado para el paso del río Magdalena en el camino del sur occidente y el centro del país, en el cual se creó el asentamiento antes mencionado.
Debido a su posición estratégica, el corregimiento tuvo un crecimiento paulatino, y, gracias a la donación de los terrenos que hoy ocupa el municipio por los señores Ramón Bueno y José Triana, se funda el municipio con nombre Girardot, en honor al General Atanasio Girardot, con ordenanza 20 del 9 de octubre de 1852, en la que reza: «...créase un distrito parroquial con el nombre de Girardot...». El primer alcalde de distrito fue Claudio Clavijo. Es en 1866 cuando se crea la parroquia (reseñado por la Gaceta de Cundinamarca No. 407 del 7 de julio de 1891), siendo su primer párroco el sacerdote José Marcelino Pardo.
La ciudad se empezó a desarrollar a través de un trazado en damero alrededor de la plaza de San Miguel, en donde se encuentra la iglesia del mismo nombre, construida en estilo neogótico.
Se registra que el primer hotel fundado en la ciudad como respuesta a la sentida necesidad de albergue para el flujo de viajeros y comerciantes fue el Hotel Cisneros, en el año de 1884. Dos años después de este suceso, la población del puerto era de 2.163 habitantes. Con la Guerra de los Mil Días, gran cantidad de refugiados liberales del sur y oriente del Tolima se asentaron en Girardot.
Después de terminada la guerra civil de los mil días, la ciudad comienza a progresar, se empiezan a trazar avenidas, la actividad comercial crece rápidamente y comienzan a formarse más barrios. En 1903, por medio de la Ley 22, el distrito parroquial de Girardot pasó a ser cabecera de provincia, conformada por los municipios de Girardot, Guataquí, Jerusalén, Nariño, Nilo y Tocaima.
fotografia Iglesia San Miguel. autor: adelmotrujillo@gmail… [CC BY-SA 3.0 (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], via Wikimedia Commons
La posición estratégica de Girardot convirtió al municipio en uno de los más importantes puertos sobre el río Magdalena y el más importante del interior del país, por donde pasaban todas las mercancías que salían y entraban a la ciudad de Bogotá. Adicional a eso, Girardot se convirtió en el puerto más importante para la salida del café colombiano al exterior proveniente del municipio de Viotá como el primer territorio productor de café en Colombia, y la industria de trilladoras de café se concentró en gran medida en la ciudad. Así mismo, el corregimiento de Flandes, al otro lado del río Magdalena, se vio tan involucrado en el movimiento comercial que su crecimiento lo convirtió en municipio en 1912.
Con la caída de la navegación fluvial en el país y la proliferación del transporte férreo, Girardot seguía siendo el punto estratégico en la conexión de gran parte del país con la capital, y eso conlleva a la construcción del Ferrocarril de la Sabana entre Girardot y Facatativá y más tarde hasta Bogotá. Luego, este se conectaría con el Ferrocarril del Pacífico (Colombia). Como consecuencia de esto, la ciudad empezó una nueva tendencia de crecimiento urbano dejando de lado el río Magdalena y concentrándose en las líneas férreas. Hoy día las líneas del ferrocarril y los edificios de ferrocarriles nacionales de la ciudad y del municipo de Flandes hacen parte del patrimonio nacional.
Fotografía: Estación del ferrocarril De Ana María Jiménez - Trabajo propio, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=21845999
En las décadas de 1940 y 1950 se decretaron auxilios muy importantes para la construcción de la plaza de mercado, el Hotel Tocarema y la plaza de ferias; también se dotó el cuerpo de bomberos, se trazaron nuevas redes de acueducto y alcantarillado, mientras que se adelantaba la pavimentación de la mayoría de las calles.
Girardot y Flandes marcaron la historia de la aviación en Colombia con el primer vuelo en el país por Scadta (hoy en día Avianca), el 19 de octubre de 1920, desde Barranquilla hasta Girardot sobre el río Magdalena. El vuelo lo realizó el piloto Helmuth van Krohn. Después, con la construcción del Aeropuerto Santiago Vila en Flandes, que antes de que existiera el aeropuerto de Techo en Bogotá servía como puente en la conexión de la ciudad y el resto del país. En 1921 se establecen las rutas entre las ciudades de Barranquilla, Girardot y Neiva; el 23 de julio de 1929 se establecieron las rutas regulares entre Girardot y Bogotá.
Con la caída de las comunicaciones por vías férreas en el país, la ciudad decae económicamente pero nuevamente sus condiciones y su localización estratégica de cercanía con la capital del país, y con un clima y un paisaje agradable, se convierte en lugar de recreación y veraneo de los capitalinos. Es así como la economía se enfoca en el sector turístico, creando grandes infraestructura de alojamiento, recreación y descanso dentro y fuera de la ciudad. Esta nueva dinámica económica genera un mayor crecimiento urbano, extendiéndose la ciudad a través de las carreteras de salida y principalmente sobre la antigua vía Panamericana, que atravesaba la ciudad. Es en ese momento cuando el crecimiento del antiguo corregimiento de Ricaurte es elevado a la condición de municipio en 1968, desprendiéndose del municipio de Girardot.
Historia tomada de Wikipedia https://es.wikipedia.org/wiki/Girardot